Rey Lear

El texto de Rodrigo García propone una lectura contemporánea de algunos de los tópicos que desvelaron a Shakespeare en la escritura de “El Rey Lear”: el desprecio por la vejez, la soledad y la locura del poder, la ambición desmedida –el materialismo como meta–, el mandato paterno, la herencia. García hace un recorte de los personajes del drama original dejando solamente a los del clan Lear (Lear, Cordelia, Regan y Goneril), pero agregando al Payaso (Bufón o Loco, en el de Shakespeare). De esta forma, obviando las tramas paralelas que desarrollan los demás personajes, se concentra en lo familiar como tópico central para desplegar los temas antes mencionados. El tratamiento estilístico del texto juega con el salto constante entre lo prosaico y lo poético, entre lo popular y lo erudito, entre lo explícito y lo velado. Se podría decir que García realiza con su Rey Lear, a través de un lenguaje tanto culto como procaz –logrando que lo sofisticado se encuentre con lo salvaje–, fuertemente intertextual, paródico y referencial, una especie de tableau vivant ético de la contemporaneidad. Uno de los tópicos esenciales tanto en el texto de Shakespeare como en el de Rodrigo García es el de la herencia. La idea de la transmisión del poder, el saber y los bienes materiales de generación en generación se expresa de diferentes modos a lo largo de la tragedia. En el montaje de García Wehbi el formato excluyente para hablar acerca de ese tópico es el alimento. El espacio escénico será el de una comilona, en donde se desatará una especie de “guerra de y por los alimentos”. De modo fuertemente paródico, utilizando la metáfora alimenticia como modo de narrar las relaciones humanas (sanguíneas, afectivas, sociales y políticas) se desarrollará la tragicomedia.

2 Histórico de funciones
2 Notas en los medios
3 Notas relacionadas