El Garra

Monologo dramático en un acto y ocho cuadros.
Versión teatral del cuento homónimo de Eva Bertaina.

Sobre el Garra:

Extraño personaje fundador de un museo en el que prácticamente vive. En su rigurosa soledad, (como la de ciertos felinos), va tejiendo una telaraña donde nos remite a otros escenarios feroces, a épocas de siniestra impunidad en la que quizás fue un protagonista, pero con características distintivas, las cuales conserva casi intactas en este presente.

No se sabe bien que hizo. Balbucea referencias contradictorias, ciertos lugares, hechos, dejando un manto oscuro y confuso como por ejemplo:

GARRA: "Gracias a ser como soy, fui encargado del Departamento Secuestros de la Bonaerense. Me llamaban ?ojo de tigre?? El secuestro de bienes muebles con orden judicial era una cosa, pero otra, era el secuestro de los bienes de los desaparecidos ¡Ese sí que era negocio!

¡Y el grupo! Fiel a muerte, lo que se dice: amistad verdadera. A mi me cuidaba la espalda el más joven y él lo sabía, si llegaba a fallar, otro lo bajaba. Ese pacto lo juramos y se cumplió a rajatabla. Yo esperaba, como buen tigre cebado, que en cualquier momento me metieran un chumbazo. Pero el miedo nunca entró en mi cabeza.

Con las pinturas no se metan ni traten de joderme, les decía yo a mis subalternos.. Todo el mundo lo sabe, no se pueden blanquear ni en el exterior. En cambio, en mis manos, la obra sale del círculo de la oferta y la demanda y nunca más verá la luz. Las tomo para gozarlas en privado. Como a las minas que chupábamos en aquella época. Cuando decidí cambiar de vida, volverme hombre público, me ocupé especialmente de construir mi imagen. Lo que se dice cambiar de pelaje. Sigo siendo felino pero de porte inofensivo. Lo que conservo fuerte, son las uñas".

9 Histórico de funciones