Tirso: la daga y el ángel

En la España del siglo XVII el fraile mercedario Gabriel Téllez, apodado Tirso de Molina, es objeto de una acusación violentísima. Entre los legajos del Consejo de Castilla figura uno donde consta cierto acuerdo de la Junta de Reformación: poner sobre Tirso la prohibición de escribir comedias u otra clase de versos profanos. En el año 1626 llega al convento de Trujillo (provincia de Cáceres, España). Allí, la fuerza arrolladora de su espíritu deberá hacer frente a los fantasmas del oprobio y la censura. La historia, centrada en el enfrentamiento de Tirso y el Criado, nos permite descubrir otros enfrentamientos más cercanos en el tiempo y en la memoria. La puesta lo remarca y dota a los protagonistas de un realismo que será severamente transformado cuando comiencen a agitarse en la celda del exilio los fantasmas de ese mundo intolerante. La dualidad del fraile mercedario que escribe comedias profanas en la España de la inquisición es el nudo de esta pieza que indaga en la relación entre Dios, el artista y su obra.
2 Histórico de funciones