Por el placer de volver a verla

Un famoso y reconocido autor teatral, nos invita a aceptar que nunca estamos solos, sumergiéndose en su pasado más presente.
Al ser un verdadero artífice de la palabra –y de las bellas e inteligentes estructuras dramáticas-decide exponerse ante el público, y, como una suerte de certero cirujano o cauteloso y paciente arqueólogo, va abriéndose paso hasta lo esencial.
Quiere saldar una deuda y, para lograrlo, deberá contar con ella. Con esa irrepetible mujer: la llave que hará girar la cerradura de su última pieza teatral. Sólo ella.
El público será testigo de este viaje al pasado más presente: un viaje al corazón abierto del teatro.
Sin prejuicios, ni preconceptos. Sin defensa, ni prevenciones; sin vergüenza, ni humillaciones, ni miedos, ni desgarros tortuosos; para que su nostalgia pueda adoptar el rostro humano de la felicidad, el escritor se atreverá a convocarla una vez más, anhelando seguir haciéndolo mientras el teatro diga sí.
Ella y él, nos invitan a creer que alguien es único cuando hace nacer en otro el infinito placer de volver a verle; y, también, que, si no fuera eso el amor, tal vez se trate de l.o más semejante al amor.
Esta pequeña gran obra nos habla de eso: del infinito placer de volver a reír y llorar junto a quien estará siempre rondándonos.
Pero, y por sobre todo, esta sencilla obra nos invita a creer que el vacío es poca cosa cuando uno está lleno de alguien…..
El teatro, es decir: el amor o aquello que más se parece a él, lo hará posible.
(Manuel González Gil)


La obra recibió los siguientes Premios Estrella de Mar 2009: Mejor espectáculo, Mejor Actriz, Mejor Dirección y Mejor Música original.
Premio José María Vilches Mejor espectáculo

3 Histórico de funciones