Opiniones sobre Dentro

  • 31/07/2009 02:39
    César
    Lei los comentarios sobre este espectaculo, todos muy respetable, para mi que soy actor y acostumbrado a la critica me parece que algunos comentarios generan debate dentro de una ambito que se reduce a cuatro o cinco mensajes, en ese lugar creo que el espectaculo cumple su cometido. Seria interesante llevar el debate a un ambito mas amplio, mas comprometido. Es una simple opinion. Yo vi este espectaculo con una amiga directora de teatro de centro america y se fue realmente conforme con lo que vio, otras personas se sintieron incomodas, quizas a otras las aburrio, En todos los casos hubo un sentimiento de algo, de lo que sea pero de algo.
    Criticar no esta mal nunca, todo lo contrario creo que hace que el artista comprenda su arte mucho mas, agredir no me parece constructivo en ningun caso. Hay publicos para cada obra, hay gente que preferimos un echo experimental que Francella en musicales y esta bien un lado y el otro.
    A mi me parece que despertarle algo a un espectador, cualquiera sea ese sentimiento, es trabajo echo, tarea cumplida.
  • 15/11/2007 15:33
    Carolina 7
    Chicos.

    Banquensé una mirada diferente a la que ustedes tienen sobre su espectáculo.

    Encontré una crítica donde transcriben "Otra crítica", realizada por un señor periodista o algo así, en definitiva un hombre. La misma es pura palabra. Bla, Bla, Bla.

    Nadie dice que no hicieron un gran esfuerzo por su obra. Pero a mi juicio es mala. Y está mal hecha.

    Ratifico mi crítica, hecha con anterioridad. Es sumamente molesto y me altera sobremanera, que cuando se deja una critica como espectadora, la gente que conforma el elenco de la obra o amigos, inmediatamente suba a Alternativa una critica "Genial" contrarrestando una mirada diferente sobre el trabajo.

    En la discrepancia se crece y por más que pongan la excelente critica de quién sea.

    Para mí la obra no está bien hecha y tengo mi derecho a opinar, es mi libertad. En última instancia será el espectador el que vaya y juzgue el trabajo.

    Carolina
  • 11/11/2007 15:16
    Ckelo
    Hola, fui a ver la obra, me pareció muy interesante, y encontré esta crítica que refleja el espectáculo.

    OBRA QUE ESTIMULA LA MENTE Y LOS SENTIDOS

    Picando cerebros

    Original e inquietante metáfora sobre la opresión y el totalitarismo de la globalización, Dentro lleva a los espectadores a un recorrido por su propia interioridad. La crueldad, la violencia, la explotación y la sumisión al sistema imperante son otros de los temas planteados en este espectáculo de breve duración, pero, a la vez, intenso y desafiante.

    Por ROMÁN FRYMER (periodista y escritor)

    Autodefinida como “una mirada reflexiva sobre el progreso deshumanizado, en el que la cantidad se ha convertido en calidad; una visión sobre alienación, productividad y consumismo”, Dentro resulta, sin dudas, una de las más valiosas producciones de la actual cartelera porteña. Hay que destacar, entonces, la acertada decisión -esta vez sí- de la gestión cultural del saliente Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que apoyó y subsidió el emprendimiento, producido por C’est Tout, colectivo artístico, y dirigido por Sofía Grenada, Natalia Pugliese y Eugenia Schvartzman (excelentes bailarinas y profesoras de danza).
    Como sucede en una ‘instalación performática itinerante’, el público es invitado a recorrer y a participar de las distintas etapas de esta obra. Pero lo que en primera instancia aparece como la visita a un matadero, donde el ganado es faenado, se transforma en un viaje pesadillesco, con laberintos kafkianos y poderosos simbolismos.
    En el comienzo, el presentador (un versátil y movedizo Javier Kussrow) recibe a la gente hablándole en varios idiomas, anticipando un trayecto que expondrá las peores miserias de la globalización. Ya en la fábrica, en vez de vacas, hay cuerpos humanos, manipulados y maniatados por el salvaje matarife (Ricardo Vargas cumple con su rol a la perfección), quien los prepara para su procesamiento. Allí, ávida, espera ‘la Máquina’, dispuesta a picar carnes y cerebros, y a domeñar voluntades.
    Con un guión inteligente y una estructura conceptual sumamente interesante, la pieza funde imágenes, danzas y sonidos que atrapan a los espectadores y los obligan a vivenciar y analizar cada escena. La música, la iluminación, los efectos sonoros que se suceden durante la obra crean atmósferas de angustia, tensión y oscuridad emocional, a la vez que marcan el ritmo mecanizado del baile (impecable performance de los intérpretes).
    Así, por ejemplo, mientras una pantalla exhibe las crueldades de las recientes guerras, se escucha "What a wonderful world", la bella melodía de Bob Thiele y George David Weiss cantada por Louis Amstrong. Se trata de un recurso con tono irónico, ya utilizado en distintas películas y series (como en el poético y hondamente dramático filme Twelve Monkeys, del talentoso y delirante cineasta británico -nacido en EE.UU.- Terry Gilliam), pero que no pierde eficacia.
    El espectáculo enfatiza en la violencia cotidiana que impacta en los individuos. Mientras que Jean-Paul Sartre entendía al ser humano como “arrojado al mundo y condenado a ser libre”, responsable de su propio accionar (y, por ende, de su destrucción), Martin Heidegger escribía en Ser y Tiempo, en 1927, antes de embarcarse de lleno en la locura de la bestia exterminadora nazi: “El hombre (Dasein o ‘ser-ahí’) ya no es él mismo. Los otros le han arrebatado el ser”. De esta forma, la sociedad (el ser-en-sociedad) ha generado un Poder tal que es capaz de someter la subjetividad de sus integrantes y exprimirlos en aras de los potentados que acumulan excedentes en las pseudodemocracias mercantilistas.
    Más allá de estos circunloquios filosóficos, en Dentro, esa explotación cotidiana se transmite claramente. De hecho, ‘la Máquina’ aterra porque el espectador reconoce sus mecanismos represivos y sabe que difícilmente pueda escapar de ella.
    Lejos de la provocación barata y fútil presente en los trabajos de José María Muscari, aquí, los recursos teatrales desafían al público a poner en juego las metáforas y los sentidos que circulan en el escenario. Al mismo tiempo, esos elementos estimulan el intelecto y aguzan la conciencia sobre los nefastos efectos del mundo en el que estamos insertos.
    Propuesta original y de inusual profundidad, altamente recomendable (de la que sólo podría criticarse un final sin fuerza expresiva), la obra explora el interior del ser humano y desnuda un exterior caracterizado por la voraz y totalizadora globalización.
    Acaso, como fenómeno artístico, por la belleza y la plasticidad de los cuerpos, por sus movimientos coordinados, Dentro ofrezca en sí mismo una cierta posibilidad de liberación a esas ataduras, una resistencia al accionar de la maquinaria capitalista y a la sociedad consumista que pretende devorarnos día a día en el seno de nuestras terribles ciudades. ¦

    ???? Muy bueno
  • 10/11/2007 21:30
    Carolina 7
    Flojo.

    Se nota que hay un esfuerzo por generar determinadas sensaciones e impresiones sobre el espectador, pero no lo logran. Se quedan a mitad de camino. La propuesta no está llevada a fondo.

    Lo más logrado, son los movimientos de los bailarines o performes. Interesantes, pero en un momento se agotan.

    Lo de las reses es trucho. No aporta nada. Es lo mismo que esté o no esté. Tal vez la metáfora es demasiado literal.

    Al igual que los hilitos colgando y los papelitos en el piso. Débil. Sin fuerza.

    Me molesto tener que esperar por un desperfecto técnico y además ver como ponían en el DVD, adelante mío, en plena representación. Soy una espectadora inteligente. No me gustan que me subestimen. Desprolijidades hacen a un todo. Te sacan de lo que estas tratando de aceptar como una convención.

    También me molestó el presentador. No me transmitió nada. Solo incomodidad. Muy forzado. En un registro de actuación sin matices.

    Regular. Mucho esfuerzo, para un resultado lamentablemente a mi parecer, mediocre.

    Caro.
  • 18/10/2007 22:56
    Yanina
    El espectáculo es muy interesante. Es una puesta imponente, muy buen trabajo. Me quedé con ganas de ver más!
  • 15/10/2007 23:06
    Dario 42
    Previo "al matadero" nos entregan un sobre. Leo las instrucciones. Todo parece prometer "algo bueno". Entro en la primera tanda. El presentador bilingüe (mezcla un inglés de las orillas y un español fraudulento) nos repite lo leído. Sonido. Los pies se mueven (o me pareció).
    Y la llegada a donde desportillan a las vacas.
    Aquí paro.

    El espectáculo me pareció débil. Mucha parafernalia, mucho sonido ambiente. Los bailarines correctos. Alguna denuncia visual -tantas eran las imágenes que uno arma ese "propósito de denuncia-status quo-rivalidad manifiesta"-, un presentador con ansias de comunicarse pero que solo se comportó como un vaqueano: me pareció que su único proposito era acomodar esos vacunos humanos que eramos nosotros.
    Y nada más.

    pd: El espectáculo es a la gorra. Dejé diez pesos. Con el tiempo estoy pensando que fueron una inversión... a muy largo plazo y cuando ya haya olvidado esos extensos 50 ó 60 minutos de mi vida.


    Anécdota: Mientras ponía la plata, uno de los que estaba en la consola me atajo y me dice:
    -qué te pareció?
    -Experimental
    Mueca visible se le dibujó a él...
    -Extremadamente experimental... le dije