Opiniones sobre Amanda, la casita

  • 27/04/2012 21:18
    Alexia E
    Excelente. Muy recomendable.

    Sol Canesa es tal vez el rostro más reconocido de la televisión infantil de nuestro país. En esta obra, precisamente, todo el universo infantil se resignifica, interpelándonos, haciéndonos reflexionar sobre cómo son formados nuestros sueños, nuestras subjetividades, y cómo para alcanzar la libertad es necesario repoblarlos.

    'Amanda, la casita' logra cartografiar el imaginario de una mujer adulta, invadida por los fantasmas y las obligaciones con que la hiper-adaptación termina encerrándola en casi una casita de muñecas.


    Pienso que esta obra nos invita a ver dónde están los nudos que es necesario desatar, para liberar el deseo, y para eso, a veces nos mete el dedo en la llaga, en otro momento nos hace llorar, y luego nos vuelve a hacer reir.

    Sol Canesa es una actriz versatil, profunda, que te mantiene todo el tiempo en estado de alerta.

    Las mujeres nos sentimos reflejadas en los deseos y temores de Amanda, mientras que los hombres que nos acompañen pueden espiar en las bondades y terrores del universo femenino metiéndose en esta 'casa'.


    La puesta en escena es impecable y el video, no te lo sacás de la cabeza en días. Es absolutamente genial!!
  • 24/04/2012 18:21
    Lau D
    Una prima me mostró hace poco un regalo entrañable que le había hecho una amiga suya, artista, para su cumpleaños: la réplica de una casa en miniatura. No solo era un encanto la casita sino también emocionante recorrer los distintos rincones de la misma para mirar los detalles, abrir las puertas de los placares, jugar con las muñecas, verlas reflejadas en los espejos, descifrar los pequeños cuadros de las paredes.
    Inmediatamente nos pusimos a jugar, cosa que consideré inevitable: el juego que este juguete de la infancia convoca es quizás intuitivo, quizás un producto cultural. Probablemente ambos. Lo cierto es que difìcilmente podemos resistirnos a él, porque en la casa está lo que uno imagina que uno es y lo que imagina que puede ser o será. La casa es uno mismo y es la proyección de la propia vida y del mundo.
    Así también lo entiende Amanda, protagonista de la recientemente estrenada obra ¨Amanda, la casita¨, quien nos invita a jugar y a recorrer su lugar vital. Esta invitación aparenta ser cándida (primera aparición, vestimenta, escenografía), pero resulta en un interesante recorrido a través de su persona, con todo lo que esta palabra implica.
    Los rincones de esta casa onírica - de juguete - real son mucho más elaborados que el mero abrir y cerrarse del mini - placard de la casita de mi prima. Cada compartimento de la casa de Amanda da inicio a un mini-sketch que remite a un fragmento de su historia o a un objeto importante o a un deseo.
    El desarrollo se da en términos múltiples: el absurdo, lo naif, el humor negro, la inevitable y explosiva carcajada, la angustia desgarradora. No son solo tonos que marca la actriz-casita con su ya conocida destreza actoral, son emociones que inevitablemente vive el espectador.
    En este unipersonal el tema no es la liberación femenina ni el lugar de la mujer en la sociedad: el tema es Amanda. Es el ser de una mujer contado en fragmentos, evocados por los espacios y objetos de la casa.
    La obra fluye con comodidad (goza de una perfecta continuidad narrativa) y, sin embargo, en los aspectos técnicos, no está desprovista de complejidades: complejidad de las palabras y de los silencios, complejidad de los recursos actorales. Del manejo del espacio y de los objetos; del pasado, el presente y el futuro. Complejidades en el juego de lenguajes y de registros. La estructura de la obra como un todo es, en sí, compleja. Si habláramos en términos musicales, podríamos decir que es una sucesión de danzas y que, sin embargo, hay una voz cantante que las une: la voz de Amanda. Todas estas complejidades revelan un complejo mundo interior que conducen al espectador a reflexiones, sentimientos, emociones a lo largo de la construcción del personaje.
    ¿Quién es Amanda? Quizás haya algo de Amanda en nosotros, pero para saberlo hay que ver la obra. Yo la recomiendo en un 100%.
    Lau Descalzi
  • 16/12/2011 18:57
    Rosicris 28
    Por un lado no encontré la propuesta de reflexión que se hace en la presentación de la obra... tal vez no pude descubrir el texto en medio de la gestualidad y movimientos excesivos e innecesarios que tapaban la posibilidad de disfrutarlo. Por otra parte, encontré que la actriz si bien tiene muchos recursos actorales, está llena de tics y lugares comunes que los esconden, eso para mí es un problema de dirección. Me gustó la escenografía, lindo el recurso. Para el compañero Chochón buscaría un lugar en la cocina donde Amanda pudiera encontrarse con él... resultó sorprendente que llegara a la escena traído de afuera, no se sabe cómo.Perdón. Como dicen que es un work-in-progress, me animo a comentar estas cosas que pueden mejorarse mucho y dejar que se descubra más la propuesta. Gracias igual por la invitación!