Opiniones sobre Macbeth

  • 08/08/2003 11:31
    Cintia V 3
    Versión criolla de un clásico de Shakespeare

    Macbeth compró castillo en Buenos Aires

    Que es un enorme desafío montar una obra de Shakespeare, nadie lo discute. Que una cosa es hacer Romeo y Julieta y otra muy distinta Macbeth, eso tampoco se pone en duda. Pero que se puede, se puede. Y sino, basta con ir al teatro Gargantúa algún viernes o sábado a las 21hs. (conviene reservar antes, porque las funciones son a sala llena) para comprobarlo. El equipo técnico y el elenco de Macbeth (adaptada y dirigida por Alex Benn) nos demuestran que se puede hacer buen teatro a pesar de los escollos económicos, sociales y de un libreto original complejo, como lo es esta tragedia histórica en 5 actos de William Shakespeare.
    Los aires medievales se respiran al ingresar a la sala, un muy correcto acomodador le habla a uno en castizo y lo alumbra con una antorcha mientras lo saluda y le da la bienvenida. La ambientación musical colabora a la predisposición para dejar volar la imaginación.
    La obra dura dos horas, pero ni se sienten... el golpe de efecto es perfecto, la historia se desarrolla con fluidez conservando algo de la poesía original, hay de todo: peleas con espadas, brujas sexis y encantamientos, despliegue de naturalezas humanas, pasión desenfadada, odios y luchas por el poder, terror, apariciones, remordimientos, predicciones, sangre, gritos desgarrados, desengaños, defensa de la esperanza, venganza, y dos pequeños actores que se llevan todos los aplausos.
    La apuesta de Alex Benn es una verdadera aventura que parece llegar a buen puerto, a no ser por la dificultad de modular ciertas líneas que tienen algunos actores y que claro, una cosa es Shakespeare en inglés, y otra muy distinta en español.
    La tragedia nos deja pensando. Cuánto de Macbeth, Macduff, Banquo o Lady Macbeth (la proyección en alguno de los 29 personajes, es inevitable) tenemos cada uno de nosotros, qué nos motiva a accionar, a quiénes prestamos oídos, cuál es nuestro ideal en la vida. ¿Nos hacemos cargo de las decisiones que tomamos… o se las achacamos al destino?
    Si está aburrido de la vida citadina, no dude en darse una vuelta por el castillo de Dunsinane, que por obra de la globalización ahora está también en Buenos Aires.