19/09/2008 20:01por Marcelo T 6 En un ambiente sofocante, que supera en intensidad a "La Omisión de la familia Coleman, se desarrolla esta tragedia donde se reproduce el "Síndrome de Estocolmo" de una manera escalofriante. La puesta en escena impulsa a la crítica de la vida propia en tanto todos estamos de tanto en tanto patéticamente en eser escenario.-
18/09/2008 23:38por Marcelo T 6 Una excelente obra que llega a fondo en el tema significación-desingnificación de la vida, en el caso, de un militar y a consecuencia de una crítica madura de su propia experiencia. Excede con grandeza los lugares comunes desde los que se suele tratar la "obediencia debida" y las dictaduras. Profundiza en el contenido de significantes colectivos como "patria" o "Inglaterra". Muy recomendable.
07/10/2007 01:53por Marcelo T 6 Desde que entré me ví instalado en el centro de un escenario que oblitera toda posibilidad de escape. Me invadió una sensación de angustia que me permitía sólo reirme sin ganas. La obra expresa un vértigo agresivo tan genialmente logrado que no se van a poder distraer: Nada permitirá que se desconecten de esa máquina infernal de locura asfixiante.
30/09/2007 10:36por Marcelo T 6 Muy buena comedia costumbrista. La falta de conocimiento de la "jerga" escolar-bonaerense no es obstáculo para representarse de qué se trata la cosa. El ambiente se percibe. Estamos ahí en el lugar, los roles se juegan muy bien. En el relato del robo al banco está nuestro estilo de chusmear.
Bravo !!!!!
Sólo una recomendación: Le sobran unos minutos.
09/07/2007 09:40por Marcelo R 6 Realmente muy buena. El personaje principal está muy bien logrado, es realmente elaborado y genera un exquisito humor. Las puestas circenses son muy profesionales.
Luisana Lopilato está en una constante superación. La recomiendo, especialmente como programa familiar de domingo. Se van a divertir con teatro de excelencia.
25/12/2006 12:38por Marcelo R 6 Me pareció una experiencia brutal de violencia urbana llevada al teatro. Realmente me asustó. Nos hace tomar conciencia de la crueldad de la experiencia cotidiana. Una realidad de las grandes metrópolis.