Opiniones de Darío

  • Mi hijo sólo camina un poco más lento 1074

    08/08/2015 14:04 por Dario 42
    Contra todos los pronósticos, sale más que airosa. Horarios nada-teatrales, vestuario, música (minimalistas), escenografía (invisible), el o los actores te agasajan y te preguntan si tomás un mate con ellos, preguntan si querés un cafecito o una factura... y la abuela alertaba que podía ocurrir que se olvidara la letra, entonces suplicaba que nos hiciéramos los distraídos
    Se inició la función y mientras transcurrían los minutos, rememoré la sobrevalorada 'La omisión de la Familia Coleman': familia disfuncional, victimización a granel, todos a los gritos, la aceptación del Otro, nadie escucha, no existe el silencio, menos la paz en esos hebreos... Aquella -sospecho- apelaba a los golpes bajos como dramaturgia, ésta realza la inteligencia en los silencios, la morosidad y cadencia en las frases, apuesta a la perspicacia del espectador, más aun, creo que tantas funciones ha agilizado la gimnasia de los actores en los diálogos punzantes de la abuela con los otros. Nada es casual allí. La mayoría de los actores eran desconocidos por mí, pero -creo- que hay dos que sacan aguas de las piedras: Mía (Paula Fernández Mbarak): su compenetración y dramaticidad en el personaje de la madre de Branko es de lo mejor en el Off-porteño. Y el personaje de Sara (Pilar Boyle): un diamante en bruto!.


    La obra, entraña una profunda paradoja: se proclama aceptar al Otro, al diferente precisamente en un teatro, que hace (casi) imposible que un discapacitado pueda subir su única escalera de acceso.
  • Nada de Dios 2

    06/11/2009 16:44 por Dario 42
    La puesta en escena, me pareció aburridísima.
    La utilización de los textos fragmentados, para quienes no la conocemos a Idea, pueden transformarse en una suerte de "iluminación" o simple tedio.
    Por momentos, me pareció lenta, sin matices, sin un hilo conductor, cadenciosa en sus movientos, terca en sus finales.
    Si vale un dato, la señora al lado mío, cabeceaba de dormida a más no poder... con lo cual, infiero, que la obra fue una extraña y asimismo hermosa canción de cuna.
  • Piaf 12

    28/09/2009 15:03 por Darío 42
    Elena es la frutilla del postre, pero no le van en saga los otros actores, los músicos, la iluminación, la escenografía... Tantas críticas positivas (demasiadas razones se perciben en el aire con el espectáculo) se acerca al lugar común.
    ¿La Elena Roger (del futuro) podrá superar a la Elena Roger actual, la de Piaf?
    Apuesto a que si viviera Piaf pagaría por verla...
    Lo juro.
  • Rodando 26

    21/07/2009 11:49 por Dario 42
    Casi sin quererlo, el protagonista nos invita a soñar, y a la manera de una road-movie, a que nos imaginemos todo.
    Caminos por la provincia, accidentes, dislates, sinrazones, delirios, divagues, alguna reflexión oculta, y más acá, elipsis varias.
    El texto, inteligente, con quiebres inesperados, resulta en una espiral que no se sabe en cómo terminará (ese, fue para mi, el mayor atractivo).
    Excelente actuación de Germán, mejor libro, las dosis exactas de silencios (aportan mucho al clima de la obra), más aun, el manejo de las luces.
    Che, me animo a pensar y les pregunto al actor y al autor: en la génesis de la obra, ¿estuvieron inspirados en una vieja canción de Sueter?
  • Anfitrión Cabaret 2

    06/07/2009 11:46 por Dario 42
    Mi fanatismo me puede.
    El tiempo pasa, y parece que Noralih se va transformando en una "bête noire" de las tablas.
    El espectáculo, alguno dirá que es para el exclusivo lucimiento de Concha del Río.
    Y lo es.
    El timing en los monólogos es perfecto, las miradas cómplices, la voz engolada, el vestuario...
    Y el talento hace el resto...
    Totalmente recomendable!!

    (You`ve done again!) :)
  • 1984 6

    16/05/2009 18:33 por Darío 42
    Una versión más de 1984 de George Orwell. En tiempos de la red Etchelon, los gps incluidos en cámaras digitales, teléfonos digitales, incluso en nuestras búsquedas de internet la hacen una obra actual.
    Una versión en la cual uno debe luchar intestinamente para no compararla con las versiones cinematográficas.
    Pero el resultado es más que decente.
    Desde la apuesta tecnológica, la disposición de las sillas (ver a los otros espectadores ver fijamente la pantalla y decirme: -imaginariamente- estoy siendo parte de la publicidad de Apple cuando introdujo la Macintosh, precisamente en... 1984), la dirección de la dramaturgia, aun más las elecciones del director.
    Todo suma. Un poco tarde mi crítica, pero valió la pena estar durante 1 hora de mi vida, presenciando algo que algunos actualmente propugnan, reclaman...


    Rescato la actuación de Sandro Mlynkiewicz, la dicción, el encogimiento de hombros, la torpeza al caminar, el discurso que debe actuar lo hacen un actor a seguir.
  • Es inevitable 131

    16/05/2009 17:48 por Darío 42
    La obra destila "lugares comunes" por doquier.
    Plantear que lo único rescatable en una relación de pareja es una mera "firma" es un upper-cut a los sentimientos que supuestamente hay entre dos seres humanos. Me pareció inteligir o sospechar que más allá del (supuesto) amor, se debe respetar cueste lo que cueste un... ¿contrato de amor?
    Apelar solamente al drama, al llanto, los reproches, la desidia, las recriminaciones a un ser apenas fallecido es... ¿constructivo?
    Che, hasta dónde conozco, la muerte no es opcional! Siempre será un límite!
    ¿Acaso una pareja no tienen toda una vida para prepararse para ese momento que ineludiblemente ocurrirá tarde o temprano?
    Pregunto: la pérdida de un ser querido ¿no nos da la oportunidad de ver toda la realidad desde un nuevo punto de vista? No es esa una oportunidad para revalorizar, decantar, generar, aniquilar o descubrir valores y sentimientos que estaban latentes en nosotros y jamás lo percibimos presentes/ausentes en nuestra conducta?
    ¿Por qué no se cuestionaron acerca de algo que pocos lo intuyen: hace falta estar con otra persona para ser feliz?
    El dramaturgo (facilmente) recurre a la victimización.
    Si se aborda el lesbianismo, desciende a: lesbianismo se lo ningunea y se lo iguala a humillación, sumisión, fractura, rencor, encono...
    Lejos de apostar a la construcción, a descubrir, a alumbrar, transita nuevamente por los reproches, la victimización (sentimiento ladino, egoísta y poroso si los hay).
    Pregunto:¿Por qué no se atrevieron a denunciar que quien está enfermo es el discriminador y no el discriminado?
    Bien, recurrir al juego de palabras (atorrante - atorrante; perro - perra... Plis, más ejemplos que se usaron en esta obra las encuentran acá: http://femmeactiva.blogspot.com/2007/08/lenguaje-sexista.html ) Bien, esos juegos de palabras ya los utilizaba Muscari un par de años atrás.
    De todo, rescato una perla: la canción que interpreta Josefina Lamarre (apuesto a futuro por ella!).
    En la gacetilla, el director denuncia: "no hay una forma de pensar. Hay muchas".
    Lástima, que no se atrevió a encontrarlas.