La Mirada o el río al que las personas se arrojan a un pozo

La obra aborda los vínculos humanos preservando una mirada sensible pese a la normalización que la vida contemporánea ejerce sobre los cuerpos. El procedimiento dramatúrgico inscribe esas relaciones en el mismo dispositivo teatral, enunciando casi a modo brechtiano su condición ficcional. El gesto distanciador, sin embargo, no repele la emoción que se instala por la belleza teatral del procedimiento mismo, y así se expone con inteligencia sensible la deconstrucción de los vínculos amorosos.