El Faro

Ezequiel ha estado internado en un neuro-psiquiátrico durante varios años, pero la terapia y los medicamentos le han hecho muy bien. Gracias a esto, está pronto a ser dado de alta. Solo ansía volver a su pueblo a descansar y recomponer su vida, aquella que abandonó después del trágico accidente en el faro, sumergiéndose en un mundo laberíntico.
Diez años han pasado y Ezequiel se encuentra de regreso en su pueblo, con piezas sueltas y cabos sin atar. Úrsula, una niña que vive cerca del faro, lo ayuda a reconstruir el rompecabezas.
Sus amigos de la infancia también regresan al pueblo.
El caso fue reabierto, misteriosamente.

El pasado toma forma, y en una vertiginosa montaña rusa entre pasado y presente, Ezequiel descubre qué pasó aquel fatídico día y todo lo que sucedió después, mientras él estaba internado.