La mujer del Anarquista

La obra fue escrita a dos manos por Roxana Aramburú y Patricia Suárez e intentaron contar en ella el anarquismo argentino desde un lugar más ligero y humorístico, pero que atraiga al espectador a interesarse en la historia de ese movimiento político en nuestro país y la violenta represión de que fue objeto. De hecho, el acto por el PRIMERO DE MAYO en la Plaza Lorea (actual Plaza Congreso) al que el protagonista quiere concurrir, es el de 1909, en el cual el coronel Ramón Falcón dio la orden de disparar a los manifestantes y dejó un saldo de 11 muertos y 80 heridos. El anarquismo en la Argentina fue uno de los primeros movimientos obreros, y en él confluían gran cantidad de inmigrantes. Aunque sus valores hoy puedan parecer utópicos, creían en la lucha y la libertad del hombre. Las mujeres tenían un lema: Ni Dios, ni Patrón, ni Marido y practicaban el amor libre. Hasta habían fundado un pueblo para habitarlo, Colonia Cecilia, en Brasil. De hecho, el protagonista de la obra y la Velluda (personaje inspirado en una mujer anarquista de armas llevar) han vivido en su tiempo en Colonia Cecilia y se han amado.

En esta comedia de puertas, el estilo de la obra es fluido, salpimentado con canciones picarescas de la década del '20, aquellas que cantaba Celia Gálmez, como "Mama, cómpreme un negro", "La Vaselina", etc. La combinación de teatro y música (así pensada desde el comienzo por las autoras) le da mayor comicidad a la obra y logrará los objetivos más importantes que debe tener una obra de teatro: entretener y hacer pensar.

2 Histórico de funciones