Gorgojo

Gorgojo hace hincapié incesantemente en dos lugares que tiene todo ser humano: el afuera y el adentro. El movimiento energético de la obra está dado por el viaje de un personaje que va desde su adentro, hacia el afuera. Primero en su adentro, sin afuera, solo reina el miedo y la desesperanza. Y luego este personaje de a poco va logrando poder escuchar al otro, empieza a salir de su Yo, como de una celda, de su adentro. Naturalmente se produce el movimiento hacia el afuera, hacia los otros.

-Gorgojo hace hincapié incesantemente en dos lugares que tiene todo ser humano.

El afuera y el adentro.

El afuera en Gorgojo: Se refiere a todo lo que está por afuera del individuo. Todo lo que tenga que ver con el otro, donde está en juego el amor, el empleo, la amistad. Todo lo que tenga que ver con lo social. La acción de dar y recibir.

También el afuera es la naturaleza, los árboles, las plantas, todo lo vivo por fuera de él, sería el afuera.

El adentro en Gorgojo:

Este adentro no habla de una simple y sana privacidad que todo ser humano debería tener. Si no que se refiere a un adentro ensimismado, un adentro que no le permite ver hacia el afuera, se pierde al otro, como símbolo del afuera, se pierde lo social, la interacción con el ser humano. El amor, la acción de dar, sin pedir nada a cambio.

Todo esto es producido por una elevada dosis de miedo que lo paraliza, lo siega, lo encierra dentro de sí y no lo deja ver, no puede ver nada por fuera de sí.

Esto habla también de que este encierro en sí mismo, tiene mucho de egocentrismo. Se podría decir que la celda del personaje es su propio Yo.

El miedo empieza a tomar protagonismo en su vida, lo domina, lo maneja y claro que a partir de estos miedos se desprenden todos los instintos e impulsos desesperados, miserables y oscuros del hombre.

Con una desesperación cada vez mayor, este personaje deambula en su habitación, que está sin llave, pero no puede salir.

Sin aceptar nada de lo que le sucede. Está desesperado. Y no encuentra ninguna posibilidad de salida.

El movimiento energético de la obra, es algo claro de exponer. Este personaje va desde su adentro, hacia el afuera.

Primero en su adentro, sin afuera, solo reina el miedo y la desesperanza. Y luego este personaje de a poco va logrando poder escuchar al otro. Por lo tanto empieza a salir de su Yo, como la celda, de su adentro. Y naturalmente se produce el movimiento hacia el afuera.

Empieza a poder sociabilizar cada vez más, primero se anima a salir de su habitación y dar un grito en la puerta d su casa, luego da una vuelta a la manzana y finalmente termina saliendo al cine con la persona a quien ama.

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