Los días de la comuna

Está situado en el convulsionado París de 1870. En un café cuatro parroquianos simbolizan una sociedad dividida en clases irreconocibles, mientras media docena de comuneros reflejan impotencia política y un par de burgueses esperan agazapados en la trastienda del movimiento.

"El fresco del París comunal se consuma en las breves páginas de un libreto palpitante. Los planteos esquemáticos, las figuras humanas acartonadas y una intención didáctica casi secular para explicar el fracaso de ciertas revoluciones, son características que estaban en los cálculos previos del autor. Forman parte de su lenguaje teatral pero jamás conspiran contra su cautelosa y ancha visión del hecho revolucionario." Noticias.

2 Histórico de funciones