No somos ni Romeo ni Julieta

Shakespeare se encuentra escribiendo su obra más importante cuando, de repente, el argumento sufre un giro total. Sus personajes se revelan ante las decisiones que el autor va tomando sobre sus destinos. Julieta pone en un aprieto a Shakespeare le ofrece un pacto que hará que la obra llegue a nuestros días tal y como la conocemos pero con páginas secretas que contengan un final alternativo. Y es que los finales que conocemos en los libros no siempre tuvieron porqué ser los únicos.