Santa Eulalia

En 1971, el cuerpo embalsamado de Evita, luego de ser desaparecido por sus enemigos alrededor de 20 años, fue entregado a Juan Domingo Perón en su casa de la calle Doctor Arce, en Madrid, y este lo deposita en el altillo de la residencia. Allí, Evita monologa con un interlocutor virtual, su marido. Ella está sola, cansada, triste, con su cuerpo maltrecho; pero habla y estalla planteando, reclamando, indagando, sobre cuestiones que hacen -sobre todo- a su derrotero personal y político. Lejos de lo panfletario y de la simpleza biográfica, la obra de Giacometto y Suárez ahonda en las luces y las sombras de uno de los personajes de nuestra historia, que entregó su vida al amor militante

3 Histórico de funciones