El Hombre de los Labios Duros

El director canta en la oscuridad mientras entran los espectadores. Se hace un silencio. Luego, todos murmuran en el fondo. El pasado, el pasado del pasado, el presente y el futuro se interpretan sencillamente. La actuación, a fin de cuentas, tiene un sentido, un significado y una razón. Basta que entre alguien, para que todo se ponga en movimiento de inmediato. El director y sus actores le muestran a los espectadores un camino a seguir, un camino de retorno al momento en que toman el camino equivocado.

"Lo que negás te somete; lo que aceptás te transforma". Carl G. Jung

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