Su majestad

Norma podría ser, en un principio, una madre como cualquier otra, dulce y comprensiva, con una vida abocada a su familia. Pero llegará el día en que comenzará a develar su costado más siniestro: ante la imposibilidad de aceptar el crecimiento de su hija, Norma busca un "arma" capaz de someterla, anularla y adormecerla para lograr tenerla siempre a su lado. La efectividad del "arma" que cae en sus manos le otorga el poder tan anhelado y le permite no sólo accionar sobre su hija, sino además sobre todas las personas cercanas y queridas. Norma inventará un juego con reglas que nadie más que ella conoce y la coronará como única y absoluta ganadora. Al menos así lo cree ella...

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