La cuarta pared

El autor Los relatos de Abelardo Castillo requieren un lector no cómplice sino testigo, distanciado y atento al detalle revelador. El autor entra en varias de sus propias ficciones y esto borra los límites que separan la realidad de lo inventado o sugieren que la realidad es una ficción. La puesta Desde el principio, el énfasis estuvo puesto en borrar la línea que separa la platea y el escenario para establecer una relación directa y activa con el público. El entrenamiento: hacer visible lo invisible Para enfrentarse a lo desconocido es necesario un interior vacío y libre. Así, el personaje es un punto de partida y no una meta previamente establecida, el teatro una liturgia de la cual el actor es el oficiante, y donde el público no asiste a una representación sino que participa de una transformación.
1 Histórico de funciones
2 Notas en los medios