Solita

Una obra sobre las mujeres y el amor.
Convertidas en cuatro jinetes, arriban a sus monturas, en busca del Amor de ayer y de hoy, arrojadas al recuerdo o a la suerte del futuro inmediato.
En su simbología, la mujer aparece en un espacio interior; allí, su corazón enardecido desnuda su latir: Reposado en la espesura del glamour, exaltado en su juventud, exiliado en el despecho, cautivado por los tibios destellos del romance. Danza, y se guarece henchida de belleza.
Aquella, vestida del alba o desvestida de estrellas, Solita, Danza.
Mientras tanto, el exterior, bajo el disfraz del deseo acecha con ojos de hombre.
Cuando Solita Danza. (Ianina Mónaco)