Cuentos de verano

Relatos de autores argentinos, extranjeros y de la propia narradora en los que se combina la mayor austeridad escénica -una silla y una luz- con el gran despliegue visual y sonoro que requiere el universo de cada historia, que van desde la penumbra de una tienda de especias donde se esconde una pareja hasta la callecita de un pueblo blanco en Andalucía.

Olinda, asistente de vestuario, lleva años viviendo en las entrañas del teatro Maipo. Tiene calle: la calle que dan las luces, las plumas, los artistas, las peleas de cartel. Saldrá de su encierro para subir a escena, para que la escuchen, para ser mirada. Tiene mucho, mucho que contar.

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